lunes, 11 de febrero de 2008

Paco

¿Se acuerdan de Paco?, ¿Aquel que ocupaba el puesto más bajo del organigrama de la empresa? Pues le han despedido, me enteré esta mañana. Me he asomado a la ventana y ya no estaba. El resto de “personajes” estaba colocado en idéntica posición, mirando la zanja que lleva abierta 3 meses, pero ya no era Paco el que se deslomaba era Jimmy, el nuevo.

Baje a averiguar que había pasado con Paco. Todos los días me daba los buenos días, incluso aquel día que resbalé él fue el único que saliendo de su zanja se acercó a ayudarme.

Le despidieron ayer, me dijeron, no fue lo suficiente “españoleitor”. Me quedé a cuadros.

Tardé un rato, pero al final logré que me dijeran donde se alojaba. Esta tarde me pase por su casa. Le tienen detenido, me dijo su casero, le van a mandar para su país esta semana. El señor me cuenta que está preocupado por si el negrito no paga, que aún no le ha pagado el alquiler de este mes y que el necesita esos 350 euros. Me cuenta también que es un chico muy trabajador y que nunca han tenido problemas con él ni con los otros 4 inmigrantes que viven allí. Me vuelvo a quedar a cuadros (350 x 5= 1750 euros).


Me acerco al cuartelillo, él fue amable conmigo, puede necesitar algo. Cuando llego allí todos me miran raro cuando explico que no le conozco, sólo de vista (ahora son ellos los que se quedan a cuadros, no entienden como puedes tener la necesidad de ayudar a alguien con el que no tienes ningún vínculo).

Finalmente me dejan pasar. Le veo al fondo, apoyado en la reja del patio con la mirada perdida, triste. Imagino que estará pensando en su familia. ¿Qué va a ser de ellos ahora? Trabajaba por 4 euros la hora, 8 horas al día, 6 días en semana (4 euros la hora x 8 horas al día x 6 días en semana x 4 semanas al mes = 760 euros). Mandaba 300 euros al mes a su familia, de los cuales se iba una parte en transacciones, pagaba 350 euros al mes de alquiler, así que le quedaban unos 110 euros para él. Con eso no le daba para comer, así que trabajaba de noche por horas en las obras de la autopista del sur donde le pagaban 3,5 euros la hora. Trabajaba y trabajaba y se le veía agotado, pero en el fondo feliz y orgulloso pues gracias a eso sus hijos podían comer.

Ahora, en cambio, su mirada es triste, le deportaran a su país y no podrá ganar dinero suficiente para alimentar a su familia ¿Qué será de sus hijos ahora?

Me gustaría ayudarlo pero no veo cómo. Ojalá nunca hubiera firmado el contrato de integración , le podría enseñar las costumbres de España pero, ¿por qué tiene que renunciar a sus costumbre para adoptar las mías? ¿Quién determina que nuestras costumbres sean mejores? No amigos, no se trata de imponer costumbres, se trata de ofrecer costumbres...

En fin, me acuesto triste, no puedo ayudar a Paco. Ojalá Jimmy tenga más suerte y aprenda a ser un buen españolito antes que se acabe el plazo. Gracias Rajoy, ahora si que ¡España, va bien!

7 comentarios:

Ce Castro dijo...

La historia de Paco me recordó a una conversación que tuve el otro día. Me decían que el "posible" advenimiento de Maricomplejines a la Moncloa podría suponer la derogación de alguna que otra ley polémica. "Me preocupa", me insistían y yo no me canso de repetir que la única ESPERANZA (que no Aguirre) de Paco está el 9 de marzo. Un saludo.

Sun-T dijo...

Acojonante, me ha encantado esta entrada puesto que va en consonancia con cierto relato que escribi para el blog : El bufon digital.
Realidad triste y dura, yo conoci a alguien asi. Y luego esta la otra cara, la de un venezolano que llego a mi empresa huyendo de la barbarie de su pais, fue muy bien recibido, pero en cuanto cojio su sitio se puso a hacer la pelota al jefe, consiguio que echaran a unos cuantos buenos trabajadores y se quedo con el puesto de encargado, hay que joderse....que chungo esta todo!!

Vidina dijo...

Vaya, esta historia es ... increíble que nadie se moleste en ayudar a un hombre que lo intenta hacer lo mejor que puede, más cuando seguro que algunos habían compartido algo más de un saludo casual...

Desde luego,¿que es ser español?.. ¿ser idiota, intolerante y fachento?

Tooenchumbao dijo...

Si chicos, la vida es asi de cruda. Paco es un caso ficticio, pero he conocido a más de un inmigrante y me han contado partes de esta historia. Yo no he hecho más que hacer un minirelato con los trozos de sus vidas. Lo realmente triste no es que no les ayudes (muchos no tenemos como hacerlo), sino que hay gente que se aproveche de ellos, de sus miserias.
Saludos y gracias por los comentarios.

Chacequem dijo...

Y vaya que si se aprovechan. Con esta gente inmigrante más de uno está haciendo el agosto y luego, a darse golpes de pecho a la Iglesia.

Sólo pido que ese dinero tan vilmente conseguido por estos sanguijuelas se lo gasten en médicos.

Salúos.

Tooenchumbao dijo...

Si ya lo dice el dicho "a dios rogando y con el mazo dando", eso es lo que caracteriza a la gran mayoría de los católicos, al menos a los que yo conozco (que no son pocos).
Saludos y gracias por la visita

Alejandro dijo...

sun-t espero que eso de "venezolano huyendo de la barbarie de su país" fuese una ironía. En Venezuela no hay barbarie ninguna, la mayor parte de todos esos que viene llorando "¡Que malo es Hugo Chávez!" son pijos a los que les ha sentado mal que el gobierno les haya hecho barbaridades del tipo de: a)¡Pagar impuestos! b)¡Hacer contratos a los trabajadores de sus empresas! y claro, con semejante "barbarie" como no van a salir corriendo de ahí los pobres. La situación en Venezuela no es en absoluto comparable a la de Ecuador, Colombia, Cuba o ningún otro país de América Latina, así que no les dejen que les cuenten cuentos, por favor.