Como por arte de magia han reaparecido los altavoces en el ordenador del trabajo, que feliz soy. Llevaba tanto tiempo envidiando a Frechín que en cuanto los he visto me he acordao de él. A ver si me duran.
Y por cierto, ayer dí el paso y le compré unos altavoces a Rayo McQueen, por su barata y pronta recuperación. Esta tarde se los voy a colocar, sí yo solana, así que si no muero electrocutada también podré disfrutar de música en el coche. Orgásmico total.
Y mañana toca cava-tete-borrachera segura jejeje
1 comentario:
¿Es mañana? Ejem... ¡Teeneeeriiiiiiiiiiiiiiiiiiifeeeeee! Bien coño bien...
En fin, tú sabes que yo siempre he ido un fiel forofo del Tete y tal, me merezco disfrutar de la fiesta y eso como el que más.
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