Rumbo al sur, devorando carretera con Quique, me encontré con Lorenzo subiendo a Granadilla. Del parabrisas a tope y todos los sentidos puestos en la carretera pasé a un calor agobiante que me obligó a apartarme a un lado de la carretera a sacarme la chaqueta. Y entonces miré hacia arriba y vi esto.
Un fisco nieve!!! pensarán algunos, pero yo no lo esperaba y me pareció precioso, tanto que durante todo el camino estuve parándome por donde podía para sacar la cumbre nevada.
Y también el mar, siempre cautivador...
Una mañana tonta, llena de pensamientos bonitos, sin miedo, valiente…
Luego el almuerzo, rápido, con prisas. Otra vez carretera, de vuelta por el norte. El paisaje cada vez más bonito, asoma el Padre Teide, al principio solo las enaguas...
...luego majestuoso.
Sin embargo ya no me acompaña el romanticismo, más bien la inquietud...
Al final, la tediosa autopista, se acabaron las fotos y la tranquilidad. Con Lorenzo brillando y la melancolía que pone Quique, todo se vuelve cada vez más difícil, más encrucijada, más sin solución, sin salida, agobiante…triste.
Al final, la tediosa autopista, se acabaron las fotos y la tranquilidad. Con Lorenzo brillando y la melancolía que pone Quique, todo se vuelve cada vez más difícil, más encrucijada, más sin solución, sin salida, agobiante…triste.
5 comentarios:
Espero que todo eso no sea por la cabecera del blog...
Ánimo
Sólo quería darte las gracias por poner un enlace a mi blog Viaje a Macondo.
Y también darte las felicidades por tu blog, seguiremos en contacto.
Saludos,
Nayra
De nada Nayra.
Gracias a ti por tu comentario.
Bienvenida.
Preciosas fotos del TEide en toda su inmensidad. Pisar el Llano de Ucanca mientras se contempla la sombra del volcán. Eso sí es un propósito.
Saludos.
Un buen propósito en verdad. Gracias por la visita y el comentario.
Se bienvenido a mi blog
Saludos
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